La cura primaveral con el elíxir de ajenjo dice el Dr. Strehlow en el Manual de Medicina de Santa Hildegarda (pág 273):

Es el remedio hildegardiano más eficaz para prevenir enfermedades crónicas serias, como reumatismo, propensión a la gripe y resfriados, arteriosclerosis, enfermedades coronarias, diabetes y embolias. El ajenjo estimula todo el sistema inmunitario y permite una buena función renal. De esta manera, los venenos y productos de desecho procedentes de los vasos sanguíneos y de los tejidos de sostén quedan eliminados. Incluso el ateroma (placas de grasas y proteínas del interior de los vasos sanguíneos) que obstruye los vasos sanguíneos o los cálculos en la vesícula o en el riñón, son eliminados. El amargo ajenjo estimula la circulación en el estómago, y facilita la digestión.

Muchos amigos de Santa Hildegarda conocen el maravilloso efecto de esta cura primaveral, que previene las enfermedades cuando todavía no es demasiado tarde. En toda la medicina moderna no hay remedio comparable. El Dr. Strehlow afirma que puede impedir la arteriosclerosis, que empieza, sin que nos demos cuenta, de una forma sibilina, a veces, treinta años antes de producirse un ataque de apoplejía o un infarto cardíaco.