Categorías: Remedio
Indicaciones:

Prevención y curación de las enfermedades del estómago y del intestino, estreñimiento, enfermedades autoinmunes, depresiones, colesterol y triglicéridos altos, regula el PH sanguíneo.

Ingredientes para dos personas:
  • Una taza de: copos de espelta, o granos de espelta rotos, o sémola de espelta.
  • 1 o 2 cucharadas de granos de espelta (previamente remojados, al menos 12 horas, y cocidos con una pizca de hisopo y tomillo serpol) al gusto.
  • Dos tazas de agua.
  • Una manzana cortada a cuadraditos.
  • Unas gotas de zumo de limón.
  • Especias en polvo: (una pizca de cada una)
    • Galanga (Alpinia galanga), una pizca
    • Pelitre, polvo de raíz (Anacyclus pyrethrum), una pizca
    • Canela molida ½ cucharilla de café
  • ½ o 1 cucharadita de miel.
  • Pasas o arándanos rojos al gusto.
  • 1 cucharadita de almendras ( en laminillas, o molidas, o a trocitos)
  • ½ cucharadita de semillas de zaragatona.

Preparación:

Echar la espelta y los granos en el agua, y hacer hervir  3-4 minutos  removiendo despacio añadir las manzanas y hervir 2.3 minutos. Añadir la miel, la galanga, el pelitre y las pasas en el último minuto. Apagar, tapar y dejar sobre la placa durante unos minutos. Añadir las almendras, la canela y la zaragatona espolvoreándolas  por encima cuando ya está cocido el Habermus.


Todas las recomendaciones y consejos que encontrará usted en esta página web se basan en los escritos de las visiones de la mística alemana del siglo XII  Santa Hildegarda de Bingen, Doctora de la Iglesia católica,  y en las interpretaciones y  opiniones de los médicos anteriormente citados que, en su práctica médica, han seguido las indicaciones y consejos de la santa desde hace ya muchos decenios  y han comprobado  la eficacia de sus afirmaciones.

Estos doctores han interpretado, lo más fielmente posible, los textos originales que fueron  escritos en latín eclesiástico de la  Alemania  del siglo XII. Como hemos dicho, los consejos y remedios contenidos en Casa Santa Hildegarda no cuestionan de ningún modo la necesidad de acudir, cuando sea necesario, a  la consulta de un médico u otro profesional titulado de la salud, a los que corresponde examinar cada caso particular para  realizar un diagnóstico y aconsejar  el tratamiento conveniente.

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